Prevención y eliminación de plagas
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Consideradas como plagas, la proliferación de ratas y ratones en se ha convertido en un verdadero problema de salud pública en muchas situaciones
Es importante actuar ante los primeros signos de infestación, llamando a un profesional autorizado para el control de plagas para mantener la población de roedores bajo control.
La familia de las ratas grandes se divide en subespecies como la rata parda, también conocida como rata de alcantarilla o surmulot y la rata negra. Son las dos especies de ratas más comunes en nuestra área.
Cautelosas, observadoras y con grandes habilidades físicas, las ratas y ratones son capaces de trepar por casi cualquier sitio, nadar durante largos periodos de tiempo y excavar a través de gruesas capas de material como paredes, suelos y revestimientos de madera maciza. Pueden ser agresivas si caen en una trampa o se ven acorraladas en una zona sin vías de escape.
Viven en las alcantarillas de las ciudades, pero la rata se encuentra allí donde hay alimento suficiente para la colonia. Viven en silos, almacenes de alimentos, tiendas, cuartos de basura, industrias alimentarias. En las paredes, áticos, desagües y entrepisos de las casas con materiales aislantes.
Omnívora, la rata come de todo: semillas, cereales, frutas, carnes, diversos alimentos para humanos y animales domésticos o de granja. Les interesan mucho las reservas de alimentos.
Las ratas negras, marrones o ratones viven en grupos y proliferan rápidamente a partir de las 6 semanas de vida. Por ejemplo, ¡una pareja de ratas genera unas 5.000 crías en sólo un año!
Los roedores son plagas discretas pero invasivas que se esconden durante el día y salen por la noche. Rara vez se ven, pero dejan rastros y daños en la propiedad a los que hay que atender para iniciar cuanto antes el control de plagas. Señales para detectar la presencia de roedores en el hogar: ruidos de arañazos en paredes y falsos techos
Cuando hay roedores (ratas, ratones,) en el hogar o la empresa, una invasión incontrolada puede tener consecuencias molestas o incluso graves.
Los roedores (ratones, ratas, ratones de campo, etc.) son por naturaleza muy desconfiados y discretos, y los habitantes de los locales a menudo ignoran su presencia.
Por ello, para luchar eficazmente contra las plagas de roedores, nada mejor que actuar de forma preventiva estableciendo un contrato de control de plagas; éste consistirá en controles regulares de cualquier punto de acceso, así como en la utilización de repelentes profesionales (ultrasonidos), trampas y cebos, y su sustitución si es necesario para garantizar una mayor eficacia y proteger la zona a largo plazo de futuras infestaciones.
Para determinar el precio de una intervención de control de plagas con la mayor precisión posible, tenemos en cuenta varios parámetros
Cada intervención es específica, por lo que es difícil mostrar un precio público; para dar una idea, la tarifa media de una intervención cuesta entre 80 y 400 euros (impuestos incluidos) entre un estudio y un edificio de varias viviendas por visita (gastos de desplazamiento y consumibles incluidos) en función de los parámetros mencionados.
Dependiendo del tipo de intervención: el tipo de roedores a exterminar (ratas, ratones, etc.), la superficie a tratar, el tamaño de la infestación, las dificultades técnicas, etc., la duración de la intervención del controlador de plagas no supera 1 hora para una vivienda de 100 m², pero si se trata de un edificio, será necesario realizar varias visitas para un seguimiento eficaz y unos resultados duraderos.