Prevención y eliminación de plagas
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Se lleva a cabo un control y prevención de las termitas y carcoma, organismos que se alimentan de la celulosa y lignina de la madera. En primer lugar, se realiza una inspección detallada y personalizada de las instalaciones, comenzando por el exterior y avanzando a las plantas interiores, inspeccionando la estructura, los elementos ornamentales y el mobiliario. Después de identificar de manera precisa el tipo de xilófago, se ejecutan tratamientos específicos según las características del edificio y los daños causados. Los tratamientos se dividen en dos enfoques diferentes según su modo de acción: barreras químicas, mediante la inyección de insecticida en la madera, y cebos mediante porta cebos de suelo y pared.
Inspección: LLevaremos a cabo a cabo una inspección exhaustiva de la propiedad para identificar cualquier signo de infestación de plagas. Esto implica revisar vigas, marcos, muebles, pisos y cualquier otra área susceptible de ser afectada.
Identificación de plagas: Una vez realizada la inspección, se identificará el tipo de plaga de madera presente, ya sea termitas, carcomas u hongos de pudrición. Cada plaga requiere un enfoque de tratamiento diferente, por lo que es importante identificarla correctamente.
Tratamiento químico: Para el control de plagas de madera, se utilizan productos químicos específicos para tratar las áreas afectadas. Estos productos pueden ser pulverizados, inyectados o aplicados directamente en la madera para eliminar las plagas y prevenir futuras infestaciones.
Tratamiento térmico: En algunos casos, el tratamiento térmico puede ser utilizado para controlar las plagas de madera. Este método implica exponer las áreas infestadas a temperaturas extremas que eliminan las plagas y sus huevos.
Barreras físicas: Para prevenir futuras infestaciones, se pueden instalar barreras físicas, como mallas o láminas de metal, en áreas vulnerables. Estas barreras ayudan a evitar el acceso de las plagas a la madera y a proteger las estructuras y los muebles.
Monitoreo continuo: Después del tratamiento, es importante realizar un monitoreo continuo para asegurarse de que las plagas no regresen. Esto implica inspecciones regulares y, si es necesario, la aplicación de medidas adicionales de control.